Luces y sombras del reinado del rey bistronómico
De por qué Hisop es un restaurante tan imprescindible como desconocido para mucha gente y por qué Oriol Ivern, su chef y propietario, está encantado mientras que a mi me hierve la sangre
Desde que publiqué esto, sigo sin saber escribir sobre restaurantes y sigue sin gustarme hacerlo. Sin embargo, aquí me tienen. También me dispongo, una vez más, a avergonzar a mi amigo Oriol. Ya te digo, amic meu, que será la última vez. Y esta vez va en serio. No más, como le dijo el boxeador panameño Mano de Piedra Durá…
Continúa leyendo con una prueba gratuita de 7 días
Suscríbete a Reflexiones de un gastrónomo angustiado para seguir leyendo este post y obtener 7 días de acceso gratis al archivo completo de posts.